Las claves del pensamiento para lograr una sociedad mejor (ética, moral y política)
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Examina Carlos Madrid Casado en unas jornadas de Fortunata y Jacinta, febrero de 2024, las distinciones entre ética, moral y política desde la perspectiva del materialismo filosófico, una visión que no es habitual en la filosofía convencional. Se critican definiciones comunes que confunden estos términos, como la que considera la ética como el estudio de la moral o la que diferencia normas autónomas (éticas) de heterónomas (morales). El materialismo filosófico propone que la ética se centra en la preservación del individuo humano, la moral en la supervivencia de los grupos y la política en la cohesión del Estado, destacando que las normas morales y políticas, a diferencia de las éticas, no son universales.
Según el materialismo filosófico, la distinción entre ética, moral y política se realiza atendiendo a su objeto, es decir, a "hacia qué van dirigidas esas normas" o "cuál es el objeto" de las mismas, en lugar de basarse en su procedencia o fundamento, como la conciencia autónoma, el alma racional, la dignidad humana o los valores humanos.
La distinción, tal como la propone Gustavo Bueno en su libro "El sentido de la vida", es la siguiente:
•La ética se refiere a los individuos. Las normas éticas están ordenadas a la preservación de la vida individual. El objetivo de la ética es salvaguardar el cuerpo de cada uno de nosotros. El plano de la ética es el plano de los individuos humanos, considerados distributivamente, abstrayéndolos de las totalidades sociales o políticas. La ética se asocia con el término griego ethos, que significa carácter y tiene un matiz de individualidad.
• La moral, en cambio, no se refiere a los individuos, sino a los grupos. Las normas morales se orientan a la preservación o supervivencia de los grupos. Estas normas rigen en grupos como la familia, el gremio, el sindicato, la empresa, la comunidad científica o la iglesia. La moral se asocia con el término latín mores, que significa costumbre, y las costumbres tienen un matiz colectivo.
• La política se refiere a la sociedad política, es decir, al Estado. Las normas políticas se orientan a la cohesión de la sociedad política, lo que se denomina la eutaxia. La palabra polis remite a la ciudad-estado griega. El objeto de las normas políticas ya no es el individuo ni el grupo, sino el Estado.
Mientras que la ética, al tener como objeto el individuo humano zoológico con necesidades universales (alimentación, no sufrir daños, etc.), es universal, la moral y la política no lo son. Las normas morales dependen del grupo específico, y las normas políticas dependen del Estado específico, pudiendo incluso ir en contra de otros estados. La moral y la política consideran a los individuos atributivamente, es decir, ya no como individuos aislados, sino como individuos relacionados entre sí, conformando grupos y sociedades políticas.
Estos tres planos (ética de los individuos, moral de los grupos y política de los estados) se distinguen conceptualmente, aunque en la realidad de la vida humana están conjugados e inseparables
En este vídeo se presenta la idea filosófica desde el materialismo filosófico de Gustavo Bueno de la ética, la moral y la política para llegar a construir un argumento sobre los derechos humanos.
